miércoles, 19 de abril de 2017

Depredadores emocionales, por la psicóloga Gema Sánchez Cueva

Una mirada, una palabra o una simple insinuación son suficientes para comenzar un proceso de destrucción del otro. Los actos que llevan a cabo los depredadores emocionales son tan cotidianos que a veces parecen normales. Las víctimas callan y sufren en silencio. Mediante un proceso de acoso moral o maltrato psicológico, un individuo puede conseguir hacer pedazos a otro.
Así como en la naturaleza existen los depredadores animales que capturan y aniquilan a otros animales para alimentarse, en el ser humano también podemos observar un fenómeno similar, conocido como el acoso moral, protagonizado por los depredadores emocionales y sus víctimas.
El acoso moral o maltrato psicológico es un fenómeno que se da en todo tipo de ambientes, como en la pareja, en el trabajo, en la familia o en el grupo de amigos.

¿Cómo es el depredador emocional?

El depredador emocional se distribuye entre todas las edades, estatus sociales, culturas y sexo. Aparentemente son sujetos normales, casi nunca líderes. Suelen ser tacaños, egocéntricos y narcisistas.
Su objetivo es el desmantelamiento moral, personal, psicológico y sociológico de las víctimas, pudiendo conseguir muchos que éstas acaben con sus vidas.
Son individuos que se sienten profundamente inferiores aunque no den esa impresión, ya que se muestran arrogantes y grandilocuentes. Son sacos de remordimientos y rabia enmascarados. Suelen de ser de fuerte ideología.
Sienten la necesidad de ser admirados, deseados, con ansias desmesuradas de éxito y poder. Presentan una desconexión con sus emociones, despreciando así, profundamente a sus víctimas.
Cuando son niños, suelen ser los típicos que tiran la piedra y esconden la mano, aquellos que causan las peleas pero que no se ven envueltos en ellas. Anhelan el protagonismo. En la adolescencia, son fríos y distantes, con poco éxito social, rodeados de uno o dos amigos, a los que manipulan. Y en la adultez se distinguen por ser arrogantes, manifestándose como poseídos de la verdad, la razón y la justicia.
A primera vista parecen sujetos controlados, sociables y aceptables, pero tras esta máscara se esconde un cúmulo de intenciones y procesos inconscientes mucho más complicado y enrevesado.

¿Quiénes son las víctimas de los depredadores emocionales?


Las víctimas se caracterizan por ser personas bondadosas, honestas, generosas, optimistas, con fuerza espiritual… Son aquellas personas que presentan características que el depredador humano anhela y envidia, características que no ha tenido. Se convertirán en un chivo expiatorio responsable de todos los males.
Un depredador emocional busca a este tipo de personas, para absorberles su energía y vitalidad. Es decir, quieren absorber aquello que envidian.
Las víctimas resultan sospechosas a ojos de los demás, ya que el proceso de acoso moral ocurre de tal manera que hace que la víctima sea vista como culpable, ya que la gente se imagina o piensa que ésta consiente o es cómplice, conscientemente o no, de las agresiones que recibe.
A menudo, oímos decir que si una persona es víctima es por su debilidad o carencia, pero por el contrario, podemos observar que son elegidas por algo que tienen de más, por algo que el agresor quiere apropiarse.
Pueden parecer ingenuas y crédulas, ya que no se imaginan que el otro es básicamente un destructor e intentan encontrar explicaciones lógicas. Comienzan a justificarse, intentando ser transparentes. Comprenden o perdonan porque aman o admiran, incluso consideran que tienen que ayudar porque son las únicas que comprenden al otro del todo. Sienten que tienen una misión que cumplir.
Mientras que el depredador emocional se agarra a su propia rigidez, las víctimas intentan adaptarse, procurando comprender qué desean consciente o inconscientemente su perseguidor y no dejan de preguntarse nunca por su propia parte de culpabilidad.
Por Gema Sánchez Cuevas

Psicóloga, docente, editora y redactora

♣ Cómo Superar La Dependencia Emocional ♣ ॐ ElMundoDeNeus.com

Psicóloga española, Neus Colomer trabaja para la Universitat de Barcelona y en 2010 publicó Las nuevas adicciones, libro donde analiza el origen y posible tratamiento de conductas compulsivas.
 

♣ Cómo Superar El Duelo De La Separación De Pareja ♣ ॐ ElMundoDeNeus.com

Psicóloga española, Neus Colomer trabaja para la Universitat de Barcelona y en 2010 publicó Las nuevas adicciones, libro donde analiza el origen y posible tratamiento de conductas compulsivas.
 

♥ La Pareja Saludable ♥ ॐ ElMundoDeNeus.com

Psicóloga española, Neus Colomer trabaja para la Universitat de Barcelona y en 2010 publicó Las nuevas adicciones, libro donde analiza el origen y posible tratamiento de conductas compulsivas.
 

jueves, 12 de enero de 2017

Psicosis


Aporte de Pablo32

Psicosis. Breve manual conceptual

Clic en el enlace.

Panel 3. Abordaje institucional de la psicosis

Aporte de Pablo32

Panel 3. Abordaje institucional de la psicosis: Liliana Zorelly Giraldo y Carolina Salazar. Departamento Desarrollo Estudiantil Universidad EAFIT. Universidad EAFIT. Viernes 2 Septiembre 2016.
Abordaje institucional de la psicosis: Una orientación por el síntoma.

Lo que las psicosis enseñan al psicoanalistas

Aporte de Pablo32

Lo que las psicosis enseñan al psicoanalistas. Conferencista invitado: Daniel Millas. Departamento Desarrollo Estudiantil Universidad EAFIT. Universidad EAFIT. Viernes 2 Septiembre 2016.
Abordaje institucional de la psicosis: Una orientación por el síntoma

Panel 2. Abordaje institucional de la psicosis

Aporte de Pablo32

Panel 2. Abordaje institucional de la psicosis: Ulises Cuéllar y Agustín Muñoz. Departamento Desarrollo Estudiantil Universidad EAFIT. Universidad EAFIT. Jueves 1 Septiembre 2016.
Abordaje institucional de la psicosis: Una orientación por el síntoma.

Nuevas modalidades clínicas de las psicosis

Aporte de Pablo32

Nuevas modalidades clínicas de las psicosis. Conferencista invitado: Daniel Millas. Departamento Desarrollo Estudiantil Universidad EAFIT. Universidad EAFIT. Jueves 1 Septiembre 2016.
Abordaje institucional de la psicosis: Una orientación por el síntoma.

Panel 1. Abordaje institucional de la psicosis

Aporte de Pablo32

Panel 1. Abordaje institucional de la psicosis: Ana María Vargas y Sara Moreno. Departamento Desarrollo Estudiantil Universidad EAFIT. Universidad EAFIT. Jueves 1 Septiembre 2016. Abordaje institucional de la psicosis: Una orientación por el síntoma.
 

Abordaje institucional de la psicosis: Una orientación por el síntoma


Aporte de Pablo32

Abordaje institucional de la psicosis: Una orientación por el síntoma. Conferencista invitado: Daniel Millas. Departamento Desarrollo Estudiantil Universidad EAFIT. Universidad EAFIT.


 Septiembre 2016.
De Carlos Gatti.

MANIPULACION NUESTRA DE CADA DIA.

¿Quién no ha hecho o quien no se ha dejado chantajear emocionalmente? .


Cuando el manipulador es hábil es un arma (y no una herramienta) poderosa para lograr que el otro pueda correrse de su centro. Apunta directamente a ejercer amenaza y culpa.
Es un juego mental : de que manera logro hacerte creer que yo tengo razón y que vos tenes la culpa de la situación y que si yo tuve un “pequeño” error,comparado con los tuyos, soy casi Heidi.
Hasta que en algún punto no nos demos la oportunidad de mirarnos …todos somos chantajistas .
Está el que muestra abiertamente su conducta manipuladora y están, los que yo llamaría encubiertos por excelencia. La victimización es una forma encubierta por ejemplo. O también el alejarnos como ofendidos ante una situación determinada, etc.

Lo que quiero expresar es, que el chantaje reúne un montón de actitudes que utilizamos habitualmente con el fin de generar en los otros una emoción determinada.
La relación padres-hijo entrena, luego, se traslada el mismo patrón al resto. Hay una copia fiel .
No existe manipulación sin chantaje emocional. 

El chantajista no soporta un “no” como respuesta. Jamás reconoce que tiene parte de responsabilidad en el conflicto que se provoco. Y a costa de lo que sea…quiere tener la razón. Esto es lo básico a tener en cuenta.

No hay chantajista sin chantajeado. Acá, nadie esta libre. Nadie es el “pobre de mi que me toco un chantajista en mi vida”.

El estar en el rol de “chantajeado”, denuncia miedos para enfrentar al otro (chantajista).Se le da al otro un poder, ¿Por qué?, porque el chantajista tiene una fortaleza en cuanto a hacer creer que el equivocado es el chantajeado. Ojo con esto. 

Si dudas de vos mismo, obvio que vas a entregarle el poder al otro y a partir de allí se arma un juego que es genialmente maquiavélico : el chantajista, se da cuenta rápidamente de cuales son tus debilidades y le sube el volumen a esas emociones; si sos culposo,le sube el volumen a tu culpa por ejemplo. Es una estrategia mental para obtener poder.

El chantajista es el que define “quien sos” en lugar de definir vos quien sos. COMO PENSAS, COMO SENTIS, Y COMO TENDRIAS O DEBIERAS PENSAR Y SENTIR.

Para salir del rol de chantajeado es importante primero darse cuenta de que uno es coautor de dicha dinámica relacional. ¿Cómo lo hago?, hablando. No es ninguna novedad.
Y para salir del rol de chantajista , primero reconocerlo , darte cuenta, es decir, conciencia de registro y por ultimo…no hacerlo más. Voluntad y decisión . Una pregunta que ayuda mucho es preguntarse : ¿ a mi me gusta este aspecto mió, este personaje?.

El chantajista proviene de una infancia con poco afecto, poca valorización. Por lo tanto, se ha transformado en un experto por conseguir aquello bajo cualquier precio y forma. Al no tener el afecto que necesitaba, comenzó a armar un juego estratégico para conseguirlo y también armar un personaje.

¿Queres tener razón…o ser feliz?. Otra pregunta interesante .

Algo muy gracioso es que cuando sus estrategias ya no alcanzan, suele recurrir a circunstancias que para el son superiores, por ejemplo “mi analista dice que tus conductas son una mierda”, se justifica a través del analista; o, “estoy leyendo un libro que dice que lo que vos haces es …”, etc.
En la dupla “chantajista-chantajeado”, me resulta importante tener presente la dinámica entre “auto castigador-castigador”. El auto castigador es el que siempre pone la responsabilidad y la culpa afuera, con lo cual siempre se coloca en el lugar del “yo no puedo”, el adulto es el otro que si “puede”.
Y el castigador, es el que toma al otro como un “pequeño eterno” y siempre estará salvando y cuidando: que hacer, como hacer, cuando hacer , etc, por que considero que sos como un niño y si vos te dejas manejar como un niño es por considerarme adulto a mi; y si las cosas no te salen bien…la culpa es mía.

El chantajista le hace creer al chantajeado que no se puede cambiar. Ojo.
No te chantajees a vos mismo. Empecemos por ahí.

Las siguientes actitudes, formas de pensamiento, que nos hacen vulnerables al chantaje emocional son :

1-Excesiva necesidad de aprobación.
2-un profundo miedo al enojo del otro.
3-una gran necesidad de paz sea cual fuere su precio.
4-tendencia a asumir demasiada responsabilidad por la vida de los demás.
5-alto nivel de inseguridad con respecto a tu valoración y capacidad. (acá el chantajista sube el volumen).
A tener presente para reforzar y laburar :
1-sostener lo que creo (personalmente no me copa la idea de defender).
2-no permitir que el miedo domine, en todo caso, permitirme escucharlo y acudir a mis recursos.
3-comunicar a quien me ha herido, mi dolor.
4-definir quien soy yo en lugar que otros me definan.
5-cumplir con las promesas que me hago a mi mismo.


Carlos E Gatti
Psicólogo clínico.Especialidad :psicoanálisis y terapia gestalt.
Terapeuta grupal. 
Docente Unr y Ucsf.
Matricula 374.

miércoles, 14 de diciembre de 2016

LA CULPA NUESTRA DE CADA DIA

LA CULPA NUESTRA DE CADA DIA… por Carlos Gatti

La culpa suele ser una de las emociones más destructivas que hay y yo agregaría, destructiva en caso de solo dejarnos llevar por su mala prensa.
Hoy quiero escribir sobre ella y su íntima relación con la responsabilidad. Voy hacia allá!.
Todos la experimentamos tanto por lo que hemos hecho como también por lo que no hemos sido capaces de hacer. Ella puede ser muy nociva pero puede tener repercusiones que pueden ser muy importantes: por un lado puede ser un motor de fuerza para responsabilizarnos y por otro lado, puede paralizarnos en la vida.
La culpa es una emoción que tiene que ver con una responsabilidad bien determinada o erróneamente determinada, es decir, otra cosa es determinar si hay responsabilidad o no la hay.
Es muy frecuente cuando sabemos o valoramos que nos hemos equivocado o que hemos hecho algo que está en contra de nuestros valores y, también, cuando hemos hecho daño a otro. Entonces uno se decepciona de quien uno es por contar con esa capacidad que todos tenemos en algún momento…de defraudar al otro y a nosotros mismos. Pero vuelvo a aclarar: en el caso de que exista responsabilidad , ya que hay casos de personas que se sienten culpable absolutamente de todo. Nos decepcionamos entonces de las expectativas que tenemos de nosotros mismos y del resto. Diría yo que es una tendencia muy humana.
En aquella sensación de haber cometido un error, se esconde también la sensación de fracaso y que tiene connotaciones en nuestra autovaloración sumado al componente de la autor recriminación ya que es muy diferente abordar la responsabilidad que uno tiene ante un acto de algo que se dijo o se dejo de decir o ante algo que se dejo de hacer y autorrecriminarse , en éste último caso, hago de la culpa el lugar de mi existencia.
Cuando hablamos de culpa también suelo ligar el concepto de “perfeccionismo”. En nuestra vida cotidiana al ser perfeccionistas, no nos permitimos errores y los convertimos en un lastre y carga terrible convirtiéndolos en un filtro por el cual vemos la vida y vamos entorpeciendo todas nuestras relaciones y todo lo que hacemos a lo largo del día.
Personalmente considero que debemos hacer una reivindicación de la culpa. Me molesta que socialmente se transmita una idea muchas veces errónea de ella mostrándola como totalmente negativa.
Un sentimiento de culpa es necesario para nuestro desarrollo personal y para el desarrollo de lo social. En caso contrario, como toda emoción mal administrada, puede ser destructiva.
Suelo decir que el sentimiento de culpa es aquel que vigila la congruencia de nuestros valores personales y sociales con respecto a nuestras conductas . Es un método control. Pero insisto, hay que saber repartir culpas.
La idea que quiero transmitir es que al sentirla uno puede reparar, rendir cuentas y responsabilizarse. En cosa contrario, se vive entonces paralizado. Esta última es la culpa destructiva y sin sentido.
Personalmente creo que está bueno el proceso de autoconocimiento y en dicho proceso identificar constantemente nuestros aciertos y errores. Cuando no vamos de acuerdo con nuestro propio SER y, que es ir al mismo tiempo con el SER de los demás, hay un reclamo existencial que nos anoticia de que le estamos errando al rumbo y será entonces de replantearnos lo que estamos haciendo, para no generalizar nuestra existencia en el auto reproche.
Suelo diferenciar entre una “culpa emocional” y una “culpa racional”. Cuando solo sentimos la primera, no llegamos a ningún lado. En ese caso, está bueno racionalizar, reflexionar, moderar y evaluar esa culpa sentimental y a través de la razón poder responsabilizar, asumir, moderar y reconocer lo que si me compete asumir y de lo que no debo asumir.
Creo que la palabra clave es REPARAR. Claro que no siempre es posible en el exterior . Personalmente siempre he creído que la reparación es interna. Si bien existe un movimiento de psicología pop que estimulan al individuo a ir a enfrentar al afuera. Pero no siempre eso es constructivo.
La reparación, en mi humilde opinión , empieza por dentro para poder plantear que es lo que se tiene que ir a hacer en el afuera. En todo caso, la culpa nos debe llevar a reconstruir algo de nosotros y re plantearnos un camino distinto. En caso contrario, solo nos quedaremos en esa culpa que es el miedo al castigo y que es un nivel de culpa más elemental y que muchas veces tiene que ver con lo religioso.
Para mí la reparación es algo espiritual y no religiosa. Reparar …es ser consciente y ser consciente es ser responsable para una transformación y conversión. Por eso mente, emoción y espíritu es fundamental para laburar el tema de la culpa.
También será importante no pasar por alto el o los resentimientos escondidos, muchas veces, detrás de nuestras culpas. Y podríamos decir que parte fundamental del remedio ante la culpa será el perdón y …reconocerla.
Cuando hay resentimiento es porque sufrimos una agresión violenta y dicho resentimiento será tan intenso como la agresión que recibimos. Es importante entonces poder diferenciar cual es mi responsabilidad en lo sufrido y cual no. Porque al principio se genera una confusión y pasamos a hacernos cargo de todo lo ocurrido. Una vez reconocida mi parte , es importante pedir perdón y perdonarme.
Hay en nosotros una sensación de omnipotencia creyendo que podemos EVITAR que ciertas cosas ocurran. Y así, creemos que podemos evitar la muerte de un ser querido o, que deberíamos evitar dicha muerte ; evitar alguna desgracia , etc.
Creo que nuestra verdadera omnipotencia como seres humanos se encuentra en nuestra capacidad de perdonar porque perdonar…es neutralizar el pasado. Y también me gusta decir que si no perdonas por generosidad hazlo por egoísmo. Porque el perdón es liberarnos , pero el resentimiento es como tomar veneno y esperar que la persona que nos ofendió se muera.
El perdón más difícil es hacia nosotros mismos. Perdonar nuestros errores, nuestras carencias; mirar hacia atrás y ver que cuando tomamos “esas decisiones”, en ese momento, fue lo mejor que pudimos hacer y reconocer que en ese momento no teníamos los recursos y herramientas . Debemos tener en cuenta que nuestras decisiones dependen de los recursos que poseemos en determinado momento de nuestras vidas.
Para finalizar, quiero decir algo que ya se ha escuchado y escucha bastante y es que está bueno aprender de los errores ; identificar esas áreas en las que frecuentemente nos equivocamos porque tenemos nuestros demonios preferidos y trabajar para transformarlos a partir de ese permiso a reconocer y re-conocernos.

Carlos E. Gatti.
Psicólogo clínico. Especialista en psicoanálisis y terapia gestalt.
Docente Unr y Ucsf.
Matrícula 374.

viernes, 21 de octubre de 2016

Saldremos de esta. Guía de salud mental para el entorno de la persona en crisis, por Javier Erro

Aporte de @Aristas
"En determinadas situaciones personas que nos rodean entran en crisis de salud mental. Deprimirse, oír voces, tener ansiedad, abusar de las drogas… Estas son respuestas habituales ante eventos estresantes. Pero en muchas ocasiones, las personas cercanas no sabemos responder adecuadamente a las necesidades que la situación plantea y dejamos a la persona sola. En esta guía se dan algunas pinceladas acerca de cómo comunicarse, qué hacer con respecto a la ayuda profesional, cómo poner límites, cómo acompañar y, en definitiva, cómo generar el apoyo mutuo necesario para la persona que atraviesa una crisis de salud mental.
Son muchos, cada vez más, los materiales teóricos que cuestionan los modelos hegemónicos de atención en salud mental. Pero nos hacen falta herramientas prácticas… saberes ubicados más allá del conocimiento especializado que sirvan para desplegar estrategias colectivas con las que reducir todo ese dolor que brota día a día en nuestros entornos. Esta publicación pretende ser uno de los muchos pasos que nos quedan por dar en esta dirección."
Clic en la imagen para leer la guia.

Técnicas para borrar de tu mente los pensamientos negativos, por Xavier Molina


Todos tenemos en mayor o menor medida algunos pensamientos negativos, pero si permitimos que se adueñen de nuestra mente pueden resultar peligrosos para nuestra salud mental. 
Los pensamientos negativos recurrentes se consolidan en nuestro cerebro y pueden llegar a ser muy molestos si no hacemos algo para deshacernos de ellos.

La estrategia de “forzarnos a no pensar en ello” es contraproducente

En el momento en que comenzamos a pensar en cosas negativas, tratamos de expulsar inmediatamente estos pensamientos. No obstante, erradicar los malos pensamientos no es tan fácil como parece, e incluso es una estrategia que puede ser contraproducente.
Combatir esta clase de pensamientos negativos y recurrentes puede incluso anclar estos patrones de pensamiento, con lo cual el problema, lejos de mejorar, se agrava. Lo cierto es que cuanto más tratamos de no pensar en algo, más cuesta sacarnos eso de nuestra mente.
Con el fin de liberarnos de estos pensamientos, será crucial enfocar el problema de un modo distinto, con las técnicas y estrategias adecuadas para limpiar nuestros malos pensamientosde una vez por todas. Aquí tienes siete formas de lograrlo.

1. Modifica tu lenguaje gestual y corporal

Párate un momento a observar cómo te mueves y qué gestos usas al comunicarte con otras personas. ¿Pareces más encorvado de la cuenta o tienes una postura corporal cerrada? ¿Tienes el ceño fruncido? ¿Cruzas los brazos?
Si notas que esto es así, cuidado porque eres más propenso a tener pensamientos negativos. De hecho, un mal lenguaje corporal puede dañar tu autoestima y mermar tu autoconfianza. Cuando nuestro estado emocional no es óptimo, los pensamientos negativos pueden surgir con facilidad.
Prueba a sonreír más a menudo y mejorar tu postura corporal, abriéndote hacia los demás. Esto ayudará a que tengas una mejor comunicación no verbal y a promover un mejor estado mental en el que no tengan cabida los pensamientos negativos recurrentes.
Aquí te dejamos un artículo que te puede ayudar en este aspecto:
"Las 5 claves prácticas para dominar el lenguaje no verbal"

2. No tengas miedo a hablar sobre el tema que te preocupa

No es raro que los malos pensamientos surjan porque tenemos problemas emocionales o de cualquier otro tipo que no hemos sabido comunicar a nadie. Cuando nos guardamos estas sensaciones para nosotros mismos, las cosas suelen ir a peor.
Si consideras que necesitas expresarle a alguien aquello que te atormenta, no dudes en hacerlo. Cuando hablamos con alguien sobre lo que nos preocupa, los pensamientos adquieren una nueva dimensión, los visibilizamos, y esto nos puede facilitar que pongamos en perspectiva. Una buena manera de empezar a borrarlos de nuestra mente.

3. ¿Conoces la meditación y el Mindfulness?

El estrés y la ansiedad con que tenemos que afrontar el ritmo frenético del día a día puede hacer que nuestro pensamiento no descanse ni se oxigene lo suficiente. Es casi imposible poder llegar a gestionar nuestros pensamientos negativos cuando no tenemos ni un minuto de relajación.
Existen distintas técnicas y filosofías que nos ayudan a poner nuestra mente en blanco y promover que nuestro cerebro reestructure los pensamientos y emociones. Por ejemplo, lameditación o la filosofía Mindfulness.
Te explicamos más sobre estas dos disciplinas en estos artículos:

4. Cambia tu perspectiva sobre las cosas

En ocasiones, los pensamientos negativos son el reflejo de que estamos mirando la realidad desde una perspectiva equivocada. Prueba a reflexionar sobre tu punto de vista, quizá te des cuenta que no eres totalmente racional a la hora de valorar lo que sucede en tu entorno.
Por ejemplo, en vez de pensar “Estoy viviendo un momento complicado en el que tengo un montón de problemas”, puedes probar a cambiar el marco y enfocarlo así: “Me parece que estoy afrontando ciertos retos que me están exigiendo mucho pero estoy en el camino de hallar soluciones”.
Fundamentalmente el mensaje es el mismo, pero usando la segunda fórmula puedes enfocar los problemas de un modo más optimista. Este pequeño cambio de actitud puede ocasionar una gran mejora en tu percepción de las cosas, puesto que estarás modificando algunas estructuras mentales.

5. La importancia de la creatividad

A veces, los pensamientos negativos se enquistan en nuestra mente y es complicado encauzarlos hacia fuera para ir borrando la mala influencia que tienen sobre nosotros.
Una de las maneras de hacerlo es encontrar una expresión artística o creativa: escribir, dibujar o tocar un instrumento musical puede ser una buena forma de canalizar mediante la creatividad estas malas emociones. Además, está demostrado que el arte puede ser muy terapéutico y logra mejorar tu estado de ánimo.
La creatividad es liberadora. Cuando somos capaces de expresarnos mediante el arte, las dinámicas negativas generadas por tus pensamientos empezarán a debilitarse para dar paso a nuevas experiencias y sensaciones.

6. Pasear y practicar ejercicio físico

Algunas personas piensan que nuestro cuerpo y nuestra mente son dos elementos claramente diferenciados y que realizan sus procesos de forma separada. Por tanto, asumen que los pensamientos se forman en la mente, y que el cuerpo no tiene nada que ver.
Esto no es exactamente así. Nuestros pensamientos también son producto del ambiente en el que vivimos, la calidad de las relaciones interpersonales que tenemos, y muchos otros factores. Te habrás dado cuenta que si estás mucho tiempo cerca de personas negativas, lo más normal es que poco a poco te “contagien” de su actitud y tu estado emocional empeore.
Apartarte temporalmente del ambiente que te crea malestar puede ayudarte mucho. Por ejemplo, dar un paseo activará regiones cerebrales que permanecen casi inactivas cuando estamos sentados. Otra buena idea para borrar los pensamientos negativos es practicar ejercicio físico, puesto que está demostrado que mejora nuestro estado de ánimo y nos reporta una buena dosis de hormonas positivas y relajación.

7. Pregúntate qué es lo que te hace feliz

Algunos pensamientos recurrentes que nos perturban tienen su génesis en una sensación de vacío existencial. Pero, ¿eres consciente de todas las cosas positivas que tienes a tu alrededor?
No es raro que, inmersos como estamos en la rutina diaria y en nuestras respectivas labores,perdamos la perspectiva general sobre las cosas relativamente positivas que tenemos en nuestras vidas. Es esencial pues que demos valor a estas cosas buenas, y darles la importancia que merecen.
Si elaboras una lista con estas cosas de las que puedes sentirte feliz y agradecido, tu estado emocional mejorará. Ten en cuenta que, en ocasiones, muchos aspectos positivos de nuestra vida pasan desapercibidos. Es tu responsabilidad volver a fijarte en ellos y valorarlos.

jueves, 20 de octubre de 2016

¿Cómo detectar si mi hijo sufre acoso escolar? por ELENA MENGUAL

Tomado de http://www.elmundo.es/sociedad/2015/10/28/562cd3df268e3eda3b8b464b.html

El acoso escolar no distingue entre sus víctimas. Cualquiera puede ser el elegido, por ser diferente del resto o precisamente por no serlo. Porque sus características físicas no gusten o justo por lo contrario. Lo que sí tienen en común quienes lo sufren es que suelen mantenerlo en secreto. A veces porque no son conscientes de que lo que sucede no es "normal". O por vergüenza. O porque piensan que tienenalgo que hace que merezcan ser tratados así. O porque creen que nadie los creerá, y si lo hacen, se les despachará con un "eso son cosas de niños". Sin embargo, la detección temprana es clave para evitar daños psicológicos graves y permanentes. Recogemos algunas claves para identificarlo a tiempo.

¿Qué es el acoso escolar?

Hay que distinguir entre una agresión puntual en un entorno escolar y el acoso. El acoso es cualquier tipo agresión psicológica o física permanente, constante y duradera. Se caracteriza por el desequilibrio de poder (la víctima, sola, frente a agresores y observadores).
¿Qué síntomas deberían ponernos en alerta?

1. CAMBIOS DE COMPORTAMIENTO. 

Es lo que se conoce como "ruptura biográfica". El problema es que muchos síntomas de acoso pueden confundirse con comportamientos típicos de la adolescencia. Y a menudo, los cambios no se dan de un día para otro, sino que es un proceso lento. Normalmente, el menor no quiere ir al colegio, se muestra nervioso cuando debe hacerlo, falta a clase o regresa en cuanto puede a casa. El fin de semana está bien y el domingo por la noche empieza a encontrarse mal. Deja de hablar o salir con sus amigos de siempre. Abandona sus aficiones. Deja de hablar en casa o responde con evasivas. Baja el rendimiento escolar. Está triste, muestra cambios de humor, contesta mal, sufre arranques de cólera.

2. SIGNOS FÍSICOS. 

Al menor se le rompe o "pierde" habitualmente el material escolar o la ropa y no sabe cómo explicarlo. Pide dinero a sus padres para poder dárselo a los acosadores (el chantaje es muy típico). "Estos signos no siempre quieren decir que haya acoso, pero sí son típicos del acoso físico", explica el psicólogo y profesor de la Universidad de Alcalá Iñaki Piñuel, experto en violencia psicológica y acoso. "Lo que sucede es que la mayor parte de las veces el acoso que sufren los escolares españoles es psicológico. Por eso el síntoma más común es el psicosomático".

3. SÍNTOMAS PSICOSOMÁTICOS. 

El niño sufre malestar al levantarse, mareos, dolores de cabeza, molestias o alteraciones gastrointestinales, sensación de asfixia u opresión en el pecho, temblores, palpitaciones, alteraciones del apetito o del sueño... Es habitual que los padres lleven al niño al médico y se le practiquen pruebas, sin que se dé con el origen de los síntomas, porque la causa es psicológica. "El propio niño muchas veces no lo identifica como acoso, ni tampoco los padres, porque no han llegado a entender lo que está sucediendo".

¿Qué pasa en su teléfono móvil?

El ciberacoso es una modalidad "demoledora", tal y como la califica el psiquiatra infantil José Luis Pedreira, porque no da tregua. El acoso no termina al llegar a casa, sino que continúa. Y permite que se multiplique el número de espectadores y de hostigadores. Por eso es importante que los padres tengan acceso al móvil, al correo y a los perfiles sociales (si los tuvieran) de sus hijos.

¿Y los niños pequeños?

En el caso de los niños de 5, 6 y 7 años, puede ser un indicativo el hecho de que omitan toda información del colegio, que no cuenten nada de lo que hacen allí. "Por ejemplo, son incapaces de pronunciar el nombre de los acosadores ('ese niño que tu sabes, mamá') porque están en una fase muy simbólica y la pronunciación del nombre evoca al personaje, es como si lo trajera", explica Piñuel. 

¿Cuáles son los cursos más problemáticos?

La intensidad máxima del acoso escolar se produce en 5º y 6º de Primaria, según el profesor Piñuel. Luego va descendiendo. "Sin embargo, sobre todo en Secundaria, algunos de esos individuos quedan marginalizados, llevan mucho tiempo sufriendo acoso y se convierten en una especie de pararrayos de la violencia. Son menos numerosos pero el acoso es más de todos contra uno".

¿Cómo se inicia?

Suele empezar con acciones de "baja intensidad", por ejemplo el acoso verbal (insultos, motes, humillaciones, propagación de falsos rumores, mensajes teléfonicos...), según explicaba en EL MUNDO la psicóloga Alicia García de Pablo. Si no se frena, puede degenerar en otros tipos de acoso, como el social (exclusión y aislamiento de la víctima, por ejemplo, se la deja fuera de las actividades colectivas), el psicológico (basado en amenazas) y el físico, que contempla tanto agresiones directas como indirectas.

Por qué es importante la detección temprana

"El problema de los protocolos actuales es que trabajan a partir de la identificación de la víctima, cuando ya es tarde y el niño ya tiene secuelas y sufre estrés postraumático", explica Piñuel. De ahí la importancia de la detección temprana.

Estrés postraumático

El cuadro de estrés postraumático infantil afecta a más de la mitad de las víctimas de acoso escolar, según el profesor Piñuel. Incluye desde alteraciones cognitivas (dificultad de atención, pérdida de memoria...) a trastornos emocionales (ansiedad, depresión...) o alteraciones del comportamiento (aislamiento, agresividad...). "Es un cuadro muy poco diagnosticado porque se asocia a un gran trauma, pero los casos de acoso por repetición pueden generar un trauma mediano que produce el mismo efecto que la exposición a un gran evento" (una violación, por ejemplo).

El apoyo de los padres, clave

Los padres siempre deben creer en el relato de su hijo y apoyarlo. No deben quitar importancia al asunto, ni culpar a la víctima. "Todavía hoy el principal problema de los niños acosados", explica Piñuel, "es que no les creen, o trivializan lo que cuentan y sofocan el relato niño. Es muy grave porque el hogar es el único lugar donde el niño puede contarlo, pero a veces los padres sufren o les genera angustia y no quieren saber, y lo despachan con un 'Pues pégales tú más fuerte'".

¿Y si cambia de colegio?

La mayoría de las veces el acosado acaba cambiando de colegio. Y no es raro que en el nuevo centro sufra también acoso. Es lo que se denomina círculo de victimización repetida. "Ese niño destruido llega a una nueva aula, y esa vulnerabilidad es detectada por los hostigadores, por lo que es elegido de nuevo", según el psicólogo. No es que el niño tenga una forma de ser que favorezca el acoso. Es que su vulnerabilidad funciona a modo de faro: atrae a los hostigadores".

¿Es cierto que el acoso te hace más fuerte?

El acoso escolar no hace a un niño más resistente, todo lo contrario; quedan destruidas sus capacidades de hacer frente a situaciones. "Se convierten en víctimas más probables de casos de acoso y en la vida adulta, de situaciones deacoso laboral, maltrato doméstico... Porque llegan con la resiliencia y la autoestima destruidas. No es bueno para el desarrollo de la personalidad ni prepara para la vida. Los niños acosados se convierten en futuras víctimas más fáciles porque su resistencia psicológica queda demolida".


martes, 18 de octubre de 2016

"El camino de la esquizofrenia"

Aporte de @Aristas.

Esta película, realizada en el año 2010, es sólo el primer paso de un proyecto denominado ¡ESQUIZOFRENIA DELENDA EST!
Este proceso está dando sus frutos y la aparición el año pasado de la web holandesa "Schizofrenie Bestaat Niet"


"La finalidad concreta de este film es contribuir a paliar el fuerte rechazo social que suscita este diagnóstico, no sólo entre el público en general sino incluso entre los profesionales de la Sanidad. Su finalidad última es contribuir a la eliminación del concepto "esquizofrenia", el cual debe ser suprimido completamente de cualquier sistema diagnóstico ya que esta denominación, por sí misma, encierra muchos perjuicios y ningún beneficio." F. Javier Álvarez Rodríguez

 

lunes, 17 de octubre de 2016

QUEDAR BIEN CON DIOS Y CON EL DIABLO, por Carlos Gatti

QUEDAR BIEN CON DIOS Y CON EL DIABLO….

Cuando decís lo que no sentís hay una movida muy fuerte en la capucha y el cuore. El famoso decir si  cuando sentimos que no.
Es una contradicción auto generada que rompe con toda armonía. 
Pero ello viene de esa famosa tendencia a querer quedar bien ante los otros por educación, por respeto, por bondad, etc. Paradigma que esconde un autoestima interesante para revisar. Y siempre el miedo a perder el cariño del otro.
Por lo tanto, no siempre es por generosidad, elección, respeto, etc. Es decir que no siempre estamos teniendo conciencia de porque estamos diciendo que si cuando queremos decir que no.
Al ser una actitud reiterada, hay una negación al propio ser y sentir, te dejas del lado y el otro toma un protagonismo desde un poder excesivo dado por vos mismo.
También surge una angustia muy fuerte por forzar decir algo que no tiene que ver con tu sentir.
¿Por qué el otro debería enojarse , si lo que tenes para decir porque lo sentís lo decis con respeto y cariño?. Porque hay que presente siempre que cuando vos sos sincero, la reacción del otro ya no es tu problema, siempre y cuando, no detectes un chantaje emocional. En este ultimo caso, amerita que te sientes con el otro y se hable : ¿Por qué ligar el amor y el cariño con lo que se piensa y siente, cuando no se esta de acuerdo con el otro?. Ojo con eso. ¿Por qué tengo que pensar que el otro no me quiere si digo que no?.
Quisiera linkear el tema con el “dar” y “recibir”. Hay algunas personas que solo dan y les cuesta recibir o pedir ya que ello implica un creer que se estará en deuda y dicho miedo te convierte en un amarrete con vos mismo, devoto de la virgen del codo. Yel universo nos da a través de los otros. Tengamos presente que somos receptores y dadores todo el tiempo.
Entonces se dice mucho que si cuando en realidad se quiere decir no, porque se esta mas acostumbrado a dar y así obtener tranquilidad ya que al decir no, se establece el derecho per se que tenemos de no querer hacer algo o de no sentir algo en particular.
Fuimos educados con la idea de que el “no” viene pegado a una excusa . No fuimos educados para la sinceridad desde aquel lugar y recibir la verdad de un “no..porque simplemente no tengo ganas”. Y cuando el “no” viene pegado a una excusa, generalmente el otro compra la excusa, muchas veces sabiendo que no es real, pero es mas fácil comprarla, porque aceptar que el otro “no quiere”, internamente es mas pesado. A ello le llamo CHANTAJE EMOCIONAL. Y encima, es un esfuerzo mucho mayor a ser sinceros.
Cuidado también con el fundamentalismo. Así como hay personas que únicamente “dan” y ceden siempre, los hay que no dan un tranco de pulga.
Se trata entonces de ni tan pelado ni tan peludo. Equilibrio : buscar que el otro sea feliz y uno disfrute de esa felicidad, respetando y respetándome, amando y sintiéndonos amados. Eso lo logramos cuando dejamos de analizar las respectivas personalidades, ya que al hacerlo, caemos en los cálculos , suposiciones, manipulaciones, etc. Y en dicha luchas de “mentes” (Egos) se diluye y pierde el fluir entre el dar y recibir.
No es verdad que nos van a querer mas por dar “de mas”, o que vamos a querer mas si nos dan mas.
Es en el tema del “de mas” donde aparece aquello del “sacrificio”, y cuando te sacrificas terminas, inevitablemente , en algún momento, cruzando a un lugar peligroso. Como en todo exceso. El lugar del “reclamo”; reclamo de incondicionalidad,como un niño que se porta “bien y es bueno” y espera su premio…como mama y papa se lo prometieron. El problema radica en que el otro no es ni tu papa ni tu mama, sino, un adulto igual a vos.
Si te quiero es por que yo te quiero y no significa que deba ponerme una carga al hombro tremebunda para explicar,justificar y corroborar que te quiero, y vos, tampoco te deberás poner una carga encima tremenda para que yo crea que vos me queres. Porque si creemos que el otro no nos quiere porque no hace tres o cuatro cosas que le pedimos, la verdad es que tenemos que revisarnos por que esta claro que tenemos una falacia importante acerca de lo que creemos que es el amor. Empecemos por ahí.
La verdad a poder decir puede ser también : “la verdad me da miedo que te enojes si te digo que no y que me dejes de querer, pero no tengo ganas de …”.
Amar no es sacrificar.

Carlos E Gatti.
Psicólogo clínico.
Terapeuta grupal. Facilitador en constelaciones familiares.
Docente Unr y Ucsf.
Matricula 374.

Autoconfianza: Claves para mejorarla

Autoconfianza: Claves para mejorarla

Nota toma de http://psicopedia.org/3344/autoconfianza-claves-para-mejorarla/

Lautoconfianza puede definirse como “la confianza en uno mismo” y tiene mucha más importancia de lo que a simple vista puede parecer; de ella depende el sentimiento de utilidad que nos atribuimos respecto al mundo que nos rodea.
Nuestro nivel de autoconfianza determina la visión que tenemos de nosotros mismos, lo que a su vez, moldea nuestro rendimiento y nuestras actividades.
Por ejemplo; ¿Cuántas veces hemos pensado en realizar una receta, pero no la hemos hecho porque hemos visto que era difícil y no nos hemos considerado capaces? ¿Cuántas veces hemos pensado que no lograremos pasar un examen? Se trata de tan solo dos ejemplos de los muchos que dependen de la autoconfianza y que están integrados en nuestro día a día.
Este nivel de autoconfianza está determinado por muchos aspectos; nuestro pasado, nuestro presente y las expectativas que tengamos de nuestro futuro; las experiencias vividas y los aprendizajes que hemos ido adquiriendo de ellas,nuestra personalidad
Son muchos los factores que influyen en nuestro nivel de autoconfianza, no obstante estamos ante un constructo moldeable y mejorable. Basta un buen entrenamiento para subir nuestro nivel de autoconfianza y materializarlo con éxitos.
Tan desadaptativo es tener un bajo nivel de confianza, como lo es tener un nivel excesivo. Los valores medios de autoconfianza permiten el autoconocimiento de nuestras limitaciones, necesarias para mantener viva la llama del aprendizaje por experiencia. Estos niveles medios son los que nos permiten desarrollar nuestra personalidad de manera óptima.

Cómo mejorar nuestra autoconfianza

¿Qué podemos hacer para mejorar nuestra autoconfianza? Basta con seguir estos pasos con constancia:
-Conócete. Tómate tu tiempo para darte cuenta de las emociones que experimentas, y entenderlas. Este paso es básico y necesario para determinar qué aspectos propician tu baja autoconfianza. Solo con una buena autoestima puede conseguirse una buena autoconfianza.
Crea un mundo a tu alrededor en el que estés verdaderamente cómodo. Vístete con ropa que te inspire confianza. Rodéate de gente que crea en ti. Convierte tus autoinstrucciones negativas en positivas (por ejemplo; ante un “no creo que lo consiga”, pensemos en un “lo voy a intentar”).
-Por cada característica negativa que venga a la mente sobre ti, piensa una positiva.
Intenta lo que no creas capaz de hacer, pero entiende que los fallos son necesarios para mejorar. Usa tus primeros intentos para sacar aquello positivo. No te desanimes si a la primera no te sale bien; te servirá para saber en qué tienes que mejorar. A la segunda te saldrá mejor. ¡Puede que tras varios intentos más, te salga bien!
Refuérzate cada éxito, por pequeño que sea. Te ayudará a seguir. El refuerzo deberá ir en consonancia con el éxito conseguido. A mayor éxito, mayor refuerzo.
No te compares con nadie. Hay gente que tiene otras cualidades de las que tienes tú, pero tú también tienes unas cuantas que los demás no tienen.
Se constante. No te desanimes. Los cambios se suceden poco a poco.
-Si te cuesta más de lo que creías y estás a punto de desistir, consulta a un profesional. Puede aplanarte el camino.
Mejorar la autoconfianza es cuestión de predisposición y constancia. El camino, desde los primeros logros, es muy gratificante; nos enseña que las limitaciones que anteriormente teníamos eran impuestas por nosotros mismos sin razón. Supone una fuente de motivación que puede cambiarnos por completo. Empezar a experimentar estos cambios depende de nosotros mismos.